Hallan indicios de antiguos tubos de lava en la superficie de Venus

¿Puede un planeta tan inhóspito como Venus guardar ecos de un pasado volcánico aún más fascinante de lo que pensábamos? Las últimas investigaciones despejan la incógnita: bajo la abrasadora atmósfera venusiana se esconden los primeros indicios de tubos de lava, estructuras subterráneas que podrían reescribir parte de la historia geológica del planeta vecino… y dar esperanza a futuras misiones humanas que se atrevan a explorar su infierno de superficie.

Venus sorprende: hallazgo de tubos de lava bajo la superficie

Venus, conocido por su ambiente extremo, vuelve a ser noticia. Un equipo internacional de científicos, liderado por Barbara De Toffoli desde la Universidad de Padua, anuncia la localización de lo que parecen ser tubos de lava ocultos bajo vastos flujos volcánicos. ¿Cómo lo han logrado? Analizando datos topográficos e imágenes de radar recopilados en diferentes misiones espaciales, una hazaña en sí misma dada la siempre traicionera atmósfera venusiana.

Estos tubos—en esencia, túneles naturales formados por lava que se enfría por fuera pero sigue fluyendo incandescente por dentro—ya habían sido identificados en la Tierra y la Luna. En cambio, en Venus, hasta ahora solo eran una hipótesis. Con este descubrimiento, cambia el relato: la superficie veneziana, tan misteriosa, comienza a mostrar más de su intrincada red subterránea.

¿Qué son los tubos de lava y cómo se reconocen?

En pocas palabras, los tubos de lava nacen cuando un flujo de lava se solidifica en la parte superior, mientras debajo sigue desplazándose material fundido. Cuando el flujo finaliza y la lava se retira, queda un canal vacío: el tubo. Según el estudio, el equipo ha identificado cuatro cadenas de fosas que, por su aspecto curvado y sinuoso, se distinguen de las formaciones rectilíneas propias de la actividad tectónica. Estas hendiduras, marcando el colapso de antiguos túneles, siguen el descenso natural de la lava por las laderas de enormes volcanes-escudo.

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Venus y la Tierra: dos mundos modelados por el fuego

Venus comparte con la Tierra más de lo que podríamos pensar. Su historia está marcada por la acción de volcanes colosales y enormes planicies de roca fundida. Las semejanzas entre ambos planetas son espectaculares, aunque su evolución haya seguido caminos radicalmente distintos. Descubrir tubos de lava en Venus no solo confirma el papel central del vulcanismo en su pasado. También ayuda a entender por qué, siendo tan similares en algunos aspectos, Tierra y Venus terminaron siendo mundos tan diferentes.

  • Vastas llanuras volcánicas dominan la geografía de Venus.
  • Volcanes-escudo y gigantescos flujos de lava marcan su piel de roca.
  • A diferencia de las cadenas tectónicas de la Tierra, los tubos de Venus siguen caminos curvados, lo que descarta procesos tectónicos como origen.

Importancia para la exploración humana

La relevancia del hallazgo se dispara si pensamos en lo que significa para el futuro. En la Luna y Marte, se ha teorizado que los tubos de lava podrían servir de refugio natural contra la radiación y las inclemencias. Venus, con su presión atmosférica demoledora y temperaturas de horno, tampoco invita precisamente a darse un paseo. Así que, si estos tubos existen de verdad en su subsuelo, alguna futura misión, robótica o incluso tripulada, podría encontrar en ellos el refugio perfecto.

El futuro: nuevas misiones y más misterios por resolver

Obtener datos sobre la superficie de Venus sigue siendo un desafío monumental; incluso los robots enviados solo han sobrevivido escasos minutos antes de sucumbir al calor y la presión. Sin embargo, la inminente misión EnVision de la ESA promete llevarnos un paso más allá con su sondas dotadas de radar penetrante. Quizás estemos a punto de cartografiar la red subterránea de Venus en serio. ¿Quién sabe qué secretos añejos esperan bajo sus volcanes?

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El avance abre, además, una nueva ventana para refinar modelos sobre la evolución térmica y tectónica del planeta. Cada indicio, cada pista, ayuda a reconstruir el puzle de cómo Venus se convirtió en el gemelo infernal de la Tierra.

Así que, la próxima vez que mires el firmamento y veas brillar Venus, piensa en los ríos de lava congelada y en la posibilidad de que, algún día, exploradores del futuro se adentren en sus túneles para descubrir los secretos ocultos del planeta más ardiente del Sistema Solar.

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